Libros de Anarres y Terramar Ediciones acaban de publicar esta obra de Horacio Ricardo Silva, con prologo de Osvaldo Bayer. Se trata de una crónica de los sucesos conocidos como la Semana Trágica de enero de 1919, fruto de una investigación histórica que demandó seis años de ardua labor.
La presentación del libro en Buenos Aires se efectuará el viernes 18 de noviembre de 2011 a las 20:30 hs. en la Biblioteca Popular José Ingenieros, calle Ramírez de Velasco 958, Capital Federal, y contará con las presencias del prologuista y del autor.
Posteriormente el autor viajará a Montevideo, Uruguay, invitado por la Biblioteca Anarquista del Cerro, donde se efectuará una segunda presentación el sábado 26 de noviembre a las 18 hs., en su sede de la calle Chile esquina Viacaba.
A continuación unas palabras sobre la obra, extraídas del prólogo de Osvaldo Bayer:
"La Semana
Trágica. La Semana de Enero. Algo inexplicable. Que un gobierno popular, votado
por la mayoría, haya cometido un crimen tan atroz como lo ocurrido en ese enero
de 1919... Represión que iba a ser el prólogo de otras dos represiones de
trabajadores cometidas por el mismo gobierno de Hipólito Yrigoyen poco después:
los fusilamientos de peones rurales patagónicos y la represión contra los
hacheros de La Forestal. Represiones ante exigencias justas de los hombres del
trabajo.
A esta profunda investigación de Horacio Silva la llamaría definitiva.
Definitiva porque recurre a todas las fuentes posibles, trae las versiones de
todos los sectores, describe profundamente la época y sus costumbres, la vida
política y los intereses reinantes. Describe las distintas reacciones de los
diferentes sectores sociales. Los problemas internos de las organizaciones
obreras. Además analiza las investigaciones ya existentes sobre este hecho
histórico. Documento por documento, interpretación por interpretación. Recurre
—de acuerdo a lo que aprendí en mi experiencia— a toda la documentación
histórica existente".
Horacio, llego a tu blog por intermedio de otro, y quería felicitarte por tus textos, los cuales leí de principio a fin por el interés que me despertaron, y como sabés, eso no sucede a menudo en el ciberespacio.
ResponderEliminarUn abrazo desde Rosario.
Gracias, Sebastián, por tus palabras; es muy gratificante recibir una devolución así, que recompensa los jirones de alma que se va dejando en cada texto. Me daré una vuelta por tu blog; un abrazo.
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